Gran Canaria es una isla llena de tesoros y paisajes llenos de contrastes. Es conocida por sus costas, para disfrutar del buen tiempo y de las playas, como las famosas Dunas de Maspalomas. Pero te proponemos adentrarte por su interior, para descubrir sus barrancos. Imagina cómo era la vida de los antiguos pobladores de la isla que solían vivir en zonas más altas.

 

Cuando aún resiste el invierno, pero se va acercando la primavera, los barrancos se tiñen de blanco y rosa. ¡Es tiempo de la floración de los almendros!

Los almendros viven en armonía con la flora autóctona de la isla, y destacan por su suavidad y elegancia. Parecen bolas de algodón.

Esta almendra, que es muy apreciada, vendrá recolectada a finales del verano.Se usa en la cocina sobre todo para preparar algunos dulces tradicionales, como el bienmesabe.

Hay muchas rutas y senderos por diferentes zonas de la isla, pero te vamos a llevar por el que recorrimos nosotros, el Barranco de Guayadeque. Ideal para disfrutar del almendro en flor y de un picnic diferente.

Hay que llegar hasta Agüimes y seguir por la carretera que lleva a Guayadeque. Recorriendo la carretera se empiezan a ver ya los primeros almendros.

Al final de la carretera se llega a una zona donde hay aparcamientos y varias casas y restaurantes cuevas, que es otra particularidad de la zona.

Desde allí empiezan muchos senderos. Uno de ellos es un sendero circular, muy sencillo. Es muy curioso también visitar la iglesia cueva de San Bartolomé, que está excavada en la roca.

Sin duda es una excursión fácil de realizar y que te permitirá conocer otra faceta de Gran Canaria, que seguramente no te dejará indiferente.

Aquí te dejamos otro post con más lugares que tienes que visitar en la isla para disfrutar de sus encantos.