Avión rumbo a Bangkok con escala en Doha. Por fin llegó el día y estamos a punto de iniciar una nueva aventura.

Tenemos todo: mochila lista, billetes y pasaportes con los visados.

Los visados para entrar en Myanmar, válidos 3 meses pero para una permanencia de 4 semanas,  los sacamos en Roma:  

Embajada del Myanmar 

Viale di Villa Grazioli, 29

00198 Roma Italia                                            

Teléfono 06 36303753                     

Email: merome2010@gmail.com

Es necesario presentar el pasaporte válido por 6 meses, 1 formulario que se puede descargar, 2 fotos, fotocopia de carta de identidad y enseñar la reserva (a mí no me la pidieron)

Costó (en 2012) 25 euros y tardaron menos de dos semanas en dárnoslos.

Así que ¡vaaamos!

El vuelo salió a su hora, a las 21.40, viajamos con la Qatar Airways  y llegamos a Doha a las 05.00 (+2 horas con Italia, y +3 con Canarias)

El vuelo fue tranquilo, viajaban muchos niños pero vimos una peli (“James y el melocotón gigante”) y jugamos un poco.

Son 4000 Km de distancia, se pasa por encima de Egipto, Bagdad,…Se veían algunas luces. Cenamos un plato de pasta con pollo, coco y verduritas, una ensalada de orzo, nueces y almendras, y un dulce de chocolate y bizcocho.

Y por fin llegamos a Doha. El aeropuerto de Doha nos resultó incómodo, porque los aviones no tienen los “fingers” con acceso directo al aeropuerto.

aeropuerto-doha

Hay que ir en guagua y dar una vuelta enorme a la pista. Primero se para en la terminal de llegadas, con salida a la ciudad, y después va a la de transfers. Lo más curioso es el control de policía con los chicos vestidos con túnicas blancas y pañuelos de cuadraditos rojos, o las mujeres de negro. También sorprende leer las conexiones del aeropuerto, desde Buenos Aires, Barcelona o Sao Paolo, hasta Medina, Dubai, Bagdad. Todo escrito en árabe, claro!

El aeropuerto tiene conexión WIFI gratuita, así que hemos escrito algunos WhatsApp y nos hemos distraído cotilleando a la gente.

A las 7.15 comenzó el embarque del 2º vuelo. Volvimos a subir a la guagua, dimos la vuelta a la laaarga pista y embarcamos! El guagüero nos hizo salir a todos por la puerta de delante, mientras que las otras tres guaguas esperaban a que nosotros bajásemos…no sé por qué se nos pasó por la cabeza pensar qué pasaría si la escena ocurriese en Roma!! 😉

Nos quedan por recorrer 5.398 Km (aunque al inicio ponía 5298…bueno, más o menos es eso, km+, km- !)

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Este avión era más grande y espacioso, con tres asientos a la derecha, tres en el medio y tres a la izquierda. Para entretenerse también tenía la pantalla con juegos, vídeos y música. Pero confieso que me quedé frita!  Sólo abrí un ojo cuando la chica nos trajo la comida: una tortilla con queso y tomate, un croissant con mermelada, un poco de fruta y una chocolatina (es para iniciar a acostumbrarnos a los desayunos con tortilla!) . Un poco más tarde nos trajo un sandwich, o de pollo con curry o con verduras…pedimos uno cada uno para probarlos. También nos dio una pasta de té y un zumo de piña y de naranja. ¡Completito!

El avión se movió poco. Esta vez sobrevolamos India y donde pronto iremos, Birmania. Se veía clarito cómo está cubierto casi todo de agua.

allá-vamos!

Y ya sobre las 7.00, llegamos a Bangkok: BIENVENIDOS

Nada más abrir la puerta se notan los 31ºC y el olor a comida típica, es para que reconozcamos dónde estamos.

Nos dieron un formulario para la aduana, que rellenamos en el avión: Nombre, Apellido, Fecha de nacimiento, Nacionalidad, Sexo, Dirección en Bangkok, vuelo de procedencia  y próxima conexión. Hay mucha gente, pero es bastante rápido: Pasaporte, formulario, te hacen una foto, te ponen el sello (no hay que pagar nada) y…ya puedes entrar, ya estamos oficialmente en Bangkok.

Todas las oficinas de cambio del aeropuerto mantienen la misma tarifa, está señalado claramente. Normalmente corresponde a 1€ = 40 THB (Bath), pero el cambio que nos dieron fue de 1€ = 38,2 THB, así que cambiamos poquito, sólo para estos dos días.

La parada del SkyTrain está en el nivel B1, es decir, dos pisos más abajo, pero hay escaleras mecánicas y un chiringuito de la oficina de turismo para pedir información y un mapa. Desde el aeropuerto cogimos la línea hacia Phaya-Thai (que es final de trayecto) y costó 98 THB con un billete de 100 nos dio una moneda y 2 fichas. Funciona así, se mete la ficha y te da una tarjeta que al salir tienes que meterla al pasar y no te la devuelve. Al llegar a Phaya Thai, hicimos un cambio. Esta vez costó 30 Bath las dos fichas. Teníamos que hacer sólo una parada y bajar en Rachamani. Ya estábamos muy cerquita del hotel.

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A pesar de que habían pasado dos años, Daniele se orientó muy bien. El chico del hotel nos estaba esperando. Hicimos el check-in y subimos a la habitación. Dejamos todo y salimos a comprar agua y a dar una vuelta por la avenida que está detrás del hotel. Se ven la primeras escenas autóctonas, gente comiendo en los chiringuitos de la calle, muchísima mercancía para vender e incluso uno que se estaba haciendo un tatuaje, ahí, apoyado a una columna por la calle! En fin, ya estamos en Asia! Ahora a descansar porque mañana tenemos que hacer muuuuchaas cosas.

Bkk