Nos gusta descubrir rincones bonitos de Italia y hemos dado con otra pequeña ciudad que bien merece una visita. Se llama Termoli y está en la Región del Molise. Además asoma al mar Adriático y se come rico marisco de la zona, ¡¡qué más se puede pedir!!
Si vienes en tren, al salir de la estación busca el Corso Nazionale y dirígete hacia el mar. Verás el castillo Suevo, pequeño y sin decoración, que destaca a la entrada del casco antiguo. Formaba parte de la cinta amurallada que aún se conserva.
Desde el Belvedere de los fotógrafos se puede apreciar muy bien, además de tener unas vistas estupendas de la playa.
La Catedral se encuentra en el interior del casco antiguo y data de los SXII y XIII. En 1456 tras un terremoto fue restaurada, conservando algunos elementos originales.
Esta ciudad esconde varias curiosidades. La primera tiene que ver con este estrecho callejón, llamado rejiecelle, que tras mucho discutir ha conseguido el título de “callejón más estrecho de Italia” (en algunos puntos no sobrepasa los 33 cm), dejando seguramente desconsolados a los ciudadanos de Ripatransone, en la región de las Marcas, que también se disputaban el título. Pero, parece como si en Termoli poca gente lo supiese, porque no está señalado, apareciendo como un callejón más. Así que ya sabes, si visitas Termoli, diviértete buscándolo.
Otra curiosidad es que Termoli es la “Greenwich italiana”, el cruce del paralelo y del meridiano se produce en la playa de Río Vivo, en la zona del puerto de la ciudad. El meridiano, conocido como Termoli-Etna, es el meridiano que determina el huso horario en Europa central y occidental, por eso se dice que es “la hora de Termoli”.
Llaman la atención pequeñas instalaciones sobre el mar, una pasarela y al final una pequeña casa. Se llaman trabocchi y son utilizados para pescar, sin necesidad de entrar en el agua y poder enfrentarse a las condiciones metereológicas. En la actualidad representan más un símbolo cultural, que medio económico.
Termoli también es un buen punto de partida para visitar las Islas Tremiti, que pertenecen al Parque Nacional del Gargano. Se les consideran “las perlas del Adriático”, así que sin duda volveremos para conocerlas.
Para dormir nos quedamos este B&B, que está en una posición óptima cerca de la catedral con habitaciones “coquetas”. Para desayunar proponen tres bares cercanos.
Y para comer nos decidimos por este restaurante, que propone platos sabrosos donde destacan los mariscos y el pescado fresco, abundante y a buen precio. Los platos de pasta los preparan al momento, ¡qué rico!
Y como postre, pásate por esta Heladería, el personal es muy amable y el helado está buenísimo.
Con lo del helado, ya me habéis ganado. Me encanta Italia, el año pasado fui unas 5-6 veces, pero en Molise no había estado nunca. De hecho tiene un poco la fama de Teruel ,como que no existe… Esta año no lo tengo entre mis planes, aunque conocer estos lugares par ir haciéndose una idea viene fenomenal.
Los helados son un peligro en Italia, buenísimos . Tienes razón, el Molise es poco conocido, pero ahora que la hemos descubierto seguro que volvemos! Tu anímate a venir!
Qué lugar tan bonito y lleno de tradiciones, como a mi me gustan. Me ha encantado lo del meridiano y la casita para pescar, bueno realmente todo porque las vistas son una delicia. Tomo nota, sobre todo también de la heladería 😉
Un saludo
Carmen
A nosotros Termoli nos ha encantado, es pequeña y muy agradable, la verdad que pasamos un buen fin de semana
Que bonito! Soy super fan de Italia. No conozco esta zona, pero tiene muy buena pinta, me gusta la playa, el marisco y el helado!!!
Habrá que hacerle una visita!
Saludos 🙂
Esta zona no es de las más conocidas, pero creo que bien merece la pena, además tiene las tres cosas : bonitas playas, mariscos riquísimos y un helado irresistible para golosos
Me encantaron las fotos y las curiosidades, me voy a anotar este destino para la próxima vez que visite esta zona de Italia, muchas gracias por compartir.
Gracias Alejandro! Si, te animamos a visitar esta zona poco conocida, nosotros seguro que seguiremos descubriéndola!