Día 1 – Cairns

Llegamos a Cairns sobre las 5.30 de la mañana provenientes de Townsville (lee aquí lo que nos pasó con los billetes y los horarios, ¡atención, leed bien si es AM o PM!!) Aún no había salido el sol pero unos árboles de colores en el Paseo de la Esplanade nos dieron la bienvenida. Buscamos un lugar donde hacer tiempo antes de ir al albergue, así que pedimos un café en una cafetería cerca del paseo marítimo y aprovemos del wifi. Organizamos un poco las próximas etapas de nuestra aventura.

Hoy estaremos en la ciudad y mañana iremos a recoger la caravana que hemos alquilado con la compañía Mighty.

Nuestro albergue estaba justo al otro lado de la estación de trenes, a unos 900m de donde estábamos, en la zona de la Esplanade. Sobre las 9.00 nos pusimos en marcha. Como íbamos cargaditos no vimos mucho en este primer viaje. La habitación nos la daban a las 12.00 pero pudimos dejar las mochilas. El lugar está bien, con salas en común con juegos y mucho color, 2 cocinas, baños y duchas compartidos.

Descansamos un poco. Mientras vimos que ofrecían alojamiento y trabajo para mochileros a cambio de 2 horas de trabajo de limpieza diarios. Durante el viaje vimos que era una práctica normal en los hostels.

Volvimos hacia el centro. La ciudad se ve alegre, tiene restaurantes y tiendas, calles amplias y una especie de Rambla que lleva desde el puerto hasta la piscina de la Esplanade.

Esta piscina, de agua salada, era muy agradable y estaba llena de gente tomando el sol.

De fondo, la marea baja de la playa y rocas llenas de cangrejitos. Más al fondo, se veían despegar a los aviones desde el aeropuerto. También había gente utilizando las barbacoas libres, que son típicas en los parques australianos.

Yendo hacia el centro pasamos también por el Rusty’s Markets, que abre los viernes, sábados y domingos. Es un lugar alegre, con puestos de frutas, comidas de Street Food y souvenirs. Había un poco de todo, gente local y no.

Desde esta ciudad salen muchas de las excursiones que te llevan a ver la Gran Barrera Coralina, que está muy cerquita. Nosotros habíamos tenido la suerte de navegar, pocos días antes, por las islas Whitsunday, con Dario y su barco Franca. Una travesía que estuvo llena de bonitas sorpresas y que pronto te contaremos también.

Así que no nos informamos más sobre las excursiones. No te pierdas sus fotos y stories en Instagram.

Despacito y por la sombra volvimos hacia el hotel para hacer el check in y entrar en la habitación. Como teníamos que buscar algo para comer no fuimos muy lejos, entramos en el centro comercial que está al lado de la estación y que teníamos enfrente. Encontramos el súper Coles y muchos sitios donde comer. Nosotros optamos por el sushi (20,5$ – 18 piezas de sushi diferentes).

Entre la siesta y una duchita, se nos hizo de noche. Preparamos la cena. La gente charla al fresquito en los balcones, pero nosotros no tardamos mucho en ir a descansar.