La provincia de Piacenza, en Emilia Romagna, está situada entre cuatro valles llenos de historia. Conoce el Val Trebbia, Val Nure, Val d’Arda y el Val Tidone cada uno con sus propias características. Valles, colinas, castillos y bonitos pueblos, ¿te vienes a conocerla?

Por estas tierras de Piacenza hay mucho que conocer entre estos cuatro valles, pero te vamos a nombrar algunos pueblos que no pueden faltar en tu visita: Bobbio, Grazzano Visconti, Castell’Arquato, Vigoleno o Rivalta.

Val Trebbia

El Val Trebbia, es el primero de los cuatro valles, cerca de Piacenza. Es una zona estupenda para dar un paseo en cualquier época del año. Un pueblo importante de este valle es Bobbio, del que ya te hablamos en este post. Bobbio es conocido por su “Ponte Gobbo” (el puente jorobado), de origen romano y la “Abbazia di San Colombano”, fundada en el siglo VII por un monje irlandés y que se puede visitar. Bobbio surge como punto de control de las rutas que se dirigían hacia Roma y las que llevaban al mar, en la cercana Liguria.

También hay que conocer el pequeño pueblo de Rivalta y su castillo, a orillas del río Trebbia, castillo que se reconoce desde lejos, ya que tiene una torre cilíndrica que lo caracteriza. El castillo, rodeado de un amplio jardín, se puede visitar (hay que reservar y controlar las actuales restricciones). Aún hoy está habitado por la familia Zanardi- Landi.

Es un pueblo tranquilo y cuidado, en el que, si quieres quedarte a dormir, puedes considerar el Hotel Torre San Martino, con habitaciones con balcón que miran al castillo, situado en los antiguos edificios del pueblo.

Además ¿sabías que por estas tierras pasó Aníbal y su ejército? Sí, sí, en estas tierras Aníbal se enfrentó a los romanos, durante las guerras púnicas, en la conocida como batalla del Trebbia.

Val Nure

Entra en el pueblo de Grazzano Visconti y sorpréndete ya que es un pueblo “con secreto”. Externamente todo es de estilo medieval: las casas, la decoración, etc., pero en realidad fue reconstruido a principios del SXX por el noble milanés de nombre Giuseppe Visconti di Modrone, que recuperó las tierras del castillo (este si de 1395) que pertenecían ya a la familia.

Es un buen lugar para hacer “un viaje al pasado” y pasar una bonita mañana. Hay que dejar el coche en el aparcamiento externo, porque en el interior, el pueblo es peatonal. Se celebran muchos eventos y nos han hablado de un Escape Room divertido que iremos a probar en cuanto se pueda.


Val d’Arda

En este valle encontramos dos pueblos de cuento, Vigoleno y Castell’Arquato.

Dicen de Vigoleno que es uno de los “Pueblos más bonitos de Italia” y no nos extraña. Nada más llegar te llamarán la atención las murallas que defienden gran parte del pueblo, y que son un signo de la importancia histórica y artística del lugar. La función de Vigoleno era de protección para sus habitantes y de control, ya que era una zona de paso entre las tierras llanas y los Apeninos que conducían al mar.

Otro pueblo que ha sabido mantener intacto su esplendor medieval es Castell’Arquato.

Observando los edificios históricos del casco antiguo, entenderemos la re`resentación de los distintos poderes: La Colegiata, representa el poder religioso; La Roca Viscontea, construida entre 1342 y 1349 y que no sirvió de residencia, sino que siempre mantuvo una finalidad defensiva y militar; el Palazzo del Podestà representando el poder político. El edificio fue construido por Alberto Scotti, señor de Piacenza, a finales de 1200. Inicialmente tuvo fines residenciales, pero se convirtió más tarde en sede política.

Castell’Arquato ha servido de escenario a muchas películas, pero es famosa sobre todo Ladyhawke (Lady Halcón) de 1985.

Val Tidone

Se sabe que el Val Tidone estaba habitado desde el Neolítico. Este valle está situado entre las provincias de Pavía y Piacenza y su paisaje está compuesto por colinas, bosques, viñedos y castillos. Será fácil encontrar un plan para recorrerlo. Te señalamos dos puntos de interés la Rocca d’Olgisio, cerca de Pianello, la más antigua de la zona y la Rocca di Agazzano

En Agazzano verás la Villa Anguissola Scotti del siglo XIII, perteneciente a la familia Scotti. Aún hoy, habitado por un ilustre miembro de la familia.

No te vayas sin probar alguna especialidad local, como el fiambre llamado culatello o este dulce conocido como sbrisoline realizado a base de almendras.