Un viaje a Egipto es un viaje al pasado. Es un viaje que nos lleva a entender parte de nuestros orígenes. Ver con los propios ojos capítulos de historia estudiados durante nuestros años de estudiante. Es dejarse sorprender y seguir el ritmo de un país con muchos contrastes. Para no perderse en este torbellino de sensaciones, te dejamos aquí algunos consejos que esperamos te resulten útiles en tu próximo viaje.

  • Visado en el aeropuerto

Si no has sacado el visado por internet y lo quieres comprar en el aeropuerto (precio 25$), antes de ponerte en la fila para pasar el control policial de pasaportes pregunta donde tienes que comprarlo (ventanillas de un banco u oficina de cambio) porque es allí donde los venden, no el policía del control.

  • Cambiar euros/dólares en EGP

En casi todos los cajeros de los bancos aparece la opción de “Change”, donde te pide que introduzcas los billetes que quieres cambiar y directamente te los da en billetes egipcios. Es muy fácil y rápido, además con un bien cambio, ya que es el oficial. Así no tendrás que preocuparte de buscar oficinas de cambios y hacer cálculos.

  • Cruzar las calles

El tráfico en Egipto en general y en El Cairo en particular es complicado, muy complicado. Coches por todas partes, sonido de claxon continuamente, no se respetan los carriles, los semáforos son decorativos y los pasos de cebra igual. Así que ¿cómo hacer para cruzar las calles? Ponte al lado de algún egipcio que vaya a cruzar y cruza al mismo tiempo que él. Eso sí, sin perder de vista los coches que continúan su curso normalmente.

 

Esta aplicación nos resultó muy útil. Sabemos que hay más, como Careem, pero nos decidimos por Uber. La usamos siempre que necesitamos un taxi.

Es fácil: introduces tu posición y adónde quieres ir. Un taxista acepta el viaje y te dice cuánto va a costar, no necesitas negociar el precio final. Te avisa del tiempo de espera hasta que llegue, y lo puedes seguir en el mapa. Si después te apetece le puedes dar una votación, dejar un comentario o añadirle propina a través del sistema. Apréndete los números del 0 al 9 para que reconozcas la matrícula del coche que viene a buscarte.

٠١٢٣٤٥٦٧٨٩

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También encontrarás los números en muchos relojes como este del metro

  • Pirámides de Giza, ¿entrar o no?

Cuando te encuentras frente a las pirámides te quedas boquiabierto de inmediato, son increíbles. Te asaltan mil preguntas, cómo se construyeron, cómo es posible que se mantengan aún en pie, cómo serán por dentro… Y qué haces, ¿no entras para descubrirlo?

Pues claro que sí. Pero avisamos, es verdad que producen claustrofobia y puede ser una experiencia no tan buena como lo esperado.

Entramos en la Pirámide de Keops, la más grande de las tres y que necesita un billete aparte. Tras pasar un tramo con altura “hombre”, empieza un largo pasillo de unos 50 o 60 metros, en los que tendrás que ir agachado (había que arrodillarse ante el faraón). Luego un tramo en el que te puedes estirar, y los últimos metros de nuevo agachados hasta entrar en la cámara del rey. La verdad que nos desilusionó porque te encuentras solamente con un sarcófago vacío y pensábamos que quedasen más restos. El problema fundamental es el alto número de visitantes al mismo tiempo, el calor tremendo que hace y que la misma pasarela por la que se sube es la que usa la gente para bajar, asi que se crean verdaderos tapones.

  • Horarios de los transportes y timos en el tren

Añade a los horarios de los trenes, autobuses, cruceros por el Nilo, al menos 1 hora y media más. Es así, los medios de transporte no son puntuales. Cuando sacas los billetes aparece un horario que en teoría es oficial, pero son siempre aproximativos. ¿Por qué? No salen siempre puntuales, realizan pausas por el camino, hay tráfico o van más lentos del previsto. Incluso los barcos de los cruceros por el Nilo no consiguen respetar los horarios establecidos ya que son muchos y realizan la misma ruta, por eso es fácil que se cree caravana también en el agua.

Durante el viaje de El Cairo a Asuán en tren, antes de llegar a Luxor un controlador nos pidió los billetes. Al darse cuenta que éramos extranjeros empezó a decir que nuestro billete no era válido y que teníamos que pagar 50$ más cada uno. Comenzó una discusión porque no pensábamos pagarlos. La controversia duró un buen rato.

El controlador decidió seguir hacia delante controlando a los demás pasajeros y se paró al lado de dos chicas griegas pidiéndoles también el “suplemento”. Se negaron y algunas personas intervinieron para ayudarlas. El tren llegó finalmente a Luxor y por arte de magia el controlador desapareció. No se volvió a ver. Más adelante pasó otro controlador diferente que no dijo nada de nuestros billetes. Así que si les sucede igual, no paguen.

  • ¿Crucero sí o no?

La respuesta que daríamos es “SNi”, ni si ni no, vaya.

Seguramente el ritmo del crucero te recuerda que estás de vacaciones: visita turística a un templo, comidas y tiempo libre en las hamacas al sol alrededor de una piscina, admirando el paisaje y los colores del Nilo. Esta seria la parte del Si.

La parte del No la dejaríamos a las visitas a los templos. Demasiada gente en el mismo lugar y a la misma hora. Los barcos salen todos al mismo tiempo (de Asuán o de Luxor) y llegan todos más o menos a la misma hora a las etapas intermedias, así que en los lugares que se visitan coinciden miles de personas al mismo tiempo. Esto origina que se creen colas infinitas para sacar las entradas, pasar los controles o que la gente coincida bajo una columna o un pasillo mientras la guía en cuestión intenta explicar la historia del templo.

  • Las propinas

En Egipto, en cualquier lugar, te pedirán “una propina” para todo. Desde el chico que coloca las maletas en el autobús o el señor que te controla los zapatos cuando entras en una mezquita. Por eso, cuando cambies uno de los billetes grandes de 100 o 200 EGP, quédate con alguno más pequeño (1, 5, 10 EGP), para tenerlos a mano. También te será útil para los baños, que se pagan (normalmente 5EGP)

  • Decoro al visitar las mezquitas

Para entrar en las mezquitas, te pedirán que respetes el decoro en el vestir. Así que nada de bermudas o camisetas con tirantes, por ejemplo. Es práctico llevar un pañuelo, que no abulta y te servirá para cubrirte la cabeza o los hombros. Y ya que te van a pedir que te quites los zapatos, ¡llévalos sin agujeritos!

 

  • Carné de estudiante internacional

Si tienes la posibilidad, acuérdate de llevar el carné de estudiante internacional porque te harán descuento en el precio de las entradas a los monumentos

Poco a poco os iremos contando algunas etapas de nuestro recorrido. Sin duda, descubrir Egipto será un viaje muy emocionante.